¿Alguna vez has dicho algo sin pensar y te ha metido en problemas? Eso es exactamente lo que le pasó a la locutora de Nippon TV, Erika Tokushima, cuando usó el término “ai no ko” durante uno de sus informes de noticias.

“Ai no ko” es un término prohibido que históricamente se ha utilizado de manera discriminatoria para referirse a personas de raza mixta. Aunque el término ya no se utiliza comúnmente, sigue siendo un recordatorio de la discriminación que han sufrido las personas de raza mixta en el pasado.

El uso del término por parte de Tokushima desató una fuerte polemica en las redes sociales, lo que llevó a la locutora a disculparse públicamente por su error. Pero esta situación nos recuerda la importancia del lenguaje y cómo nuestras palabras pueden tener un gran impacto en los demás.

El lenguaje es una herramienta poderosa y, como tal, debemos ser cuidadosos con cómo lo utilizamos. Debemos ser conscientes de las palabras que utilizamos y de cómo pueden afectar a los demás.

El manual del periodista (en Japon) sugiere que, en lugar de usar términos como “ai no ko” o “konketsuji”, debemos describir a las personas de raza mixta en términos más específicos, como “su padre es japonés y su madre alemana”.